Anugama me contó que el ropaje con el que vestía era el ceremonial. Concretamente el que se ponen los de su tribu cuando celebran el "matrimonio inminente".
-¿Matrimonio inminente?- pregunté yo.
-Nosotros, los warubianos, celebramos el matrimonio antes de llevarlo a cabo, por eso lo llamamos "matrimonio inminente". Nos ponemos nuestro mejor vestido, que normalmente heredamos de nuestros antepasados, y hacemos una gran fiesta. Esta fiesta suele durar varias semanas lunares, y culmina con un festín sexual al que invitamos a las tribus vecinas. Después dedicamos el resto de nuestra larga vida a la búsqueda de la pareja. Así es más práctico.
Verdades como templos me contó Anugama.
Acrílico y tinta. 29x42cm. |